La irregular temporada del Leicester City continua. Después de la derrota en la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones frente al Sevilla, el vigente campeón de la Premier League ha decidido prescindir de los servicios de su entrenador, el italiano Claudio Ranieri.
Después de que la pasada temporada, el equipo de la ciudad de Leicester tocara el cielo venciendo por primera vez en su historia la competición liguera británica, esta campaña ha sido un cambio radical en todos los aspectos del día a día y los resultados del equipo azul y dorado.
Doble cara en casa y en competición europea
El equipo dirigido por Claudio Ranieri está en puestos cercanos a la zona de descenso, teniendo resultados muy irregulares, siendo el peor campeón de la historia de la Premier League.
Sin embargo, en la Liga de Campeones, las cosas eran totalmente distintas. En la fase de grupos, el Leicester City superó con holgura a equipos como el Oporto de Iker Casillas o el Brujas belga, y llegó al bombo de los octavos de final de la máxima competición continental como la gran sorpresa del torneo.
La derrota ante el Sevilla, la gota que colma el vaso
En el partido de la ronda de octavos de final de la UEFA Champions League, disputado en el Ramón Sánchez Pizjuan frente al Sevilla F.C, el Leicester quería obtener una buena renta para el partido de vuelta, que se disputa en Inglaterra, en el King Power Stadium.
La derrota por dos tantos a uno en el feudo sevillista ha sido la gota que ha colmado el vaso de la paciencia de la directiva, que ha tomado la decisión con carácter inmediato de destituir al que seguramente, sea el mejor entrenador de su historia reciente.