logo twÁlex Martín

España ha debutado de la mejor manera posible en el Campeonato de Europa sub-21. El equipo dirigido por Albert Celades ha goleado a la selección de Macedonia por cinco goles a cero, con una exhibición del futbolista del Real Madrid Marco Asensio, que ha anotado tres goles y ha comandado a la selección, que con esta goleada se pone líder de grupo. El centrocampista del Atlético Saúl, y Gerard Delofeu, hasta ahora en el Milan, han completado el marcador.

A pesar de la buena salida del equipo rival, con un buen fondo físico que le ha puesto algún impedimento a la selección española, los jugadores de Celades han tomado desde los primeros minutos el control del partido. En el minuto 10, una jugada comandada por Marco Asensio ha terminado en un centro al área de Gayá que ha aprovechado Saúl para batir al portero de Macedonia, y puso el primer gol de España en el Campeonato de Europa sub-21.

Apenas 6 minutos después, en el 16′, Asensio, poniendo una vaselina al guardameta, metía el primero del que sería su hat-trick en el partido, el primero de la fase de grupos. El mallorquín fue el líder indiscutido, y antes de la media hora, España tenía el partido resuelto ya que Deulofeu anotó el tercer tanto del partido al transformar un penalti por mano de un jugador de la selección de Macedonia tras un centro del jugador del Valencia José Luis Gayá.

Los otros dos tantos del combinado español fueron del jugador del Real Madrid y la estrella del equipo. Asensio, a los pocos minutos de que se reanudara el partido, desde la frontal, lanzó un disparo que se envenenó cuando rozó a un defensa y se metía de forma inapelable en la portería rival. Ese 4-0 dejó visto para sentencia un partido en el que, de principio a fin, España fue la clara dominadora de la situación ante una Macedonia muy inferior al once español.

A falta de menos de veinte minutos para el final del partido, Asensio, de nuevo, y tras zafarse de dos defensores tras un contrataque de la selección española, se inventó un disparo desde fuera del área que le fue imposible detener al portero de Macedonia, un testigo más de la exhibición de uno de los mejores jugadores jóvenes del mundo, y que su temporada en el Real Madrid, lejos de asustarle, le ha hecho crecer como futbolista y en la que ha mostrado su gran personalidad y su falta de complejos.